Su familia le oculta la noticia por si acaso, y hablan con su médico:
Es que no sabemos como decirselo por si le da un ataque.
Déjenmelo a mí, que yo soy su médico de toda la vida, y sabré cuando está en condiciones de decírselo.
Total que el tío va a revisión como todas las semanas y el médico empieza:
Muy bien Manolo, estás muy bien. Oye, por hablar de algo,
¿y tú que harías si te tocasen 1.000 millones a la primitiva?
Hombre, pues lo primero darte a ti 500 por haberme tratado toda la vida.
Aaaggggghh
Y el médico murió de un ataque al corazón.
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